Declan, el heredero de la familia Harrison, se casa con Claire, la hija de un magnate adinerado debido a un arreglo familiar. Declan conoce a Claire el día de su boda y vaya sorpresa se lleva cuando ve a una mujer de casi 150 kilos en el altar. Rápidamente Declan se convierte en el hazmerreír del evento y a regañadientes continúa con el matrimonio con esta desconocida. Él está obsesionado con las apariencias y ella siente un amor muy intenso por él, lo que solo empeora las cosas. Declan se desquita cruelmente con ella e incluso critica su peso. Muy herida, Claire decide emprender un viaje de pérdida de peso determinada a hacer que Declan se arrepienta de sus acciones.