Jessica, la Reina Lobo, se cansó de la guerra y la matanza así que se ocultó como una simple curandera en el bosque. Para asegurar una vida normal y feliz para su hija, la envió con la manada Russo, sin saber que la había enviado a un infierno; su hija fue tratada como esclava y fue humillada, abusada, golpeada y casi violada solo porque no tenía ni fama ni poder. Al darse cuenta de su error, Jessica decidió salvar a su hija y hacer pagar a quienes la maltrataron. A la vez descubrió que la manada Russo había traicionado a su país y colaboró con Lord Killian Darkmoon. Finalmente, Jessica los derrota y restaura la paz en el mundo de los lobos una vez más.